lunes, 22 de marzo de 2010

capitulo 1



Nuestra historia comienza 3 décadas antes en una de las mansiones más lujosas de la ciudad de Miami. Víctor Carreras-Nuñez (Jaider Villa) , un joven guapísimo de 18 años, está espiando a una de sus sirvientas, mayor que él y de raza negra, que se está duchando. La mira con deseo.
--vas a ser mia... yo sé que eso que tu rechazo no es más que un truco para que yo me interese más por ti... Seguro que lo que quieres es hacer el negocio de tu vida, las mujeres como tú están acostumbradas a venderse pero conmigo no... Yo soy demasiado hombre y un macho como yo no necesita de pagar a una mujerzuela para tener sexo... --piensa mientras la devora con los ojos.

Mientras los padres del muchacho, Sergio y Manuela (Andrés Garcia y Nórida Rodriguez), están discutiendo.
--tienes que hablar con tu hijo... No puede ser que nuestro Víctor solo piense en mujeres...
--él es hombre y nació bien macho... debes estar bien orgullosa de él...
--pero es que todas las criadas se quejan de que las acosa y cuando no dicen que las ha obligado a acostarse con él a cambio de no echarlas...
--eso no me lo creo... esas mujeres de servicio son todas una arrastradas que lo único que quieren es atrapar a un hombre y por eso se regalan a uno detrás de otro... Nuestro hijo es muy macho... Yo haría lo mismo...
--¡¡Sergio¡¡ --dice la mujer furiosa.
--si fuera soltero mujer... estas cosas son normales cuando es joven y macho y se tiene la planta de nuestro hijo...
--es que así no va a llegar a ningún sitio, debería preocuparse de los estudios para ser alguien de provecho...
--ya tendrá tiempo de amargarse la vida no le cortes las alas...

Cuando sale de la ducha totalmente desnuda, la criada se da cuenta que está siendo espiada. Se cubre...
--¡¡que hace aquí señorito¡¡
Víctor la mira con cara de degenerado:
--no te hagas la que no sabes que miraba. Lo has hecho para poner a cien.--dice tocándose el paquete-- tú me has puesto cachondo y tú me vas a enfriar...
--¡¡no me haga nada¡¡ya se lo he dicho¡¡por favor¡¡¡yo estoy aquí para trabajar¡¡
--¡¡tu estás aquí para hacer lo que yo te diga, Naná, y ahora quiero acostarme contigo¡¡ya me cansé de este jueguito, yo quise hacer las cosas bien pero contigo no se puede¡¡
Naná trata de huir pero se da cuenta que la puerta está cerrada. Él la abraza y le arranca la toalla con la que se cubría:
--¡¡ya verás... no la vamos a pasar muy bien¡¡se va a gustar mucho...¡¡nunca una negra como tú habrá disfrutado tanto¡¡
Ella trata de luchar:
--¡¡no me haga daño¡¡
él se le ríe:
--no, tranquila... vas a gozar mucho, sólo duele la primera vez y tú tienes mucho kilometraje ramera... ¿¿crees que no sé que te lo has hecho con todos los negros que han pasado por aquí?
--¡¡no fue con todos pero esto no le da derecho a venir aquí¡¡ --dice ella forcejeando.
Víctor la suelta. Está muy excitado:
--¡¡ya me cansé de este juego¡¡
Víctor se aparta de ella. Se saca el reloj:
--¡¡vale por lo menos 6 meses de tu sueldo¡¡
Lo deja en la mesita y además se saca su billetera y deja al lado un montón de billetes, todo lo que llevaba.
--¡¡es mucho más de lo que mereces pero yo me quiero dar el gusto¡¡
Naná agarra el dinero y el reloj y se lo tira a la cara:
--¡¡yo no soy una prostituta¡¡
Víctor está furiosa:
--¿¿que no? ¡¡ya verás como sí, ramera¡¡¡
Víctor agarra con fuerza a esa mujer y la hace prisionera de su cuerpo. Mientras que con una mano la silencia con la otra se desabrocha los pantalones y la hace suya con brutalidad. Ella se retuerce de dolor y de vergüenza. Llora y grita para dentro. Es breve pero Víctor se desahoga y se siente muy satisfecho. Se abrocha los pantalones y se le rie:
--bueno... ya me conociste... ramera... ya tienes uno más en tu lista, te puedes sentir orgullosa porque seguro que es la primera vez que se te beneficia alguien tan importante como yo... y es que una mugrosa negra como tú no merece carne tan delicada pero me dabas pena...¡¡y ya deja de estar de floja que tienes mucho que limpiar¡¡¡
Naná se queda destrozada moralmente. Víctor se va muy satisfecho. Antes de entrar en la casa, una joven de 18 años, se le acerca con desesperación.
--me tienes que ayudar Sergio...
él es muy despectivo con ella.
--¡¡Víctor no... no seas confianzuda muchacha, para ti soy el señorito¡¡
Él se iba a ir pero ella lo retiene. Lo agarra del brazo.
--¡¡no me toques¡¡
--tu madre me va a echar...
--ese es tu problema... seguro que te quisiste meter en la cama de mi padre como lo hiciste conmigo... --dice él con ironía.
--¡¡no me hagas esto... tú has sido el primero¡¡
Él la mira burlón:
--¿si?¿y?
--¡¡tú me prometiste que si te dejaba hacerme el amor me ibas a proteger¡¡
Víctor la mira con desprecio y dice:
--¡¡fuera¡¡

Por otro lado, Naná se viste con vergüenza. Llena de odio va a ver a la señora.
--¡¡su hijo me violó y ahora mismo lo voy a denunciar¡¡
Manuela se angustia mucho y avisa a su esposo.
--¡¡ya sabía que nuestro hijo algun día nos iba a meter en un lio¡¡
Y a pesar que Manuela trata de evitarlo, Sergio golpea con mucha dureza a la negra hasta que retire sus palabras. Naná insiste.
--¡¡¡VICTOOOOOOOORRRRRRRRRRRRRR¡¡ --Sergio.
El muchacho no solo niega las acusaciones de la desesperada Naná sino que dice con cinismo:
--como puedes ser así...? tu has estado jugando con fuego... hasta te me metías en el baño para verme desnudo...
--¡¡eso no es verdad¡¡todo fue al revés¡¡ --llora Naná.
Víctor ríe con cinismo.
--¡¡has tenido algo con esta muchacha¡¡?? --pregunta Manuela molesta.
--claro que sí... ella se me vendió... ¿y porque la iba a rechazar?
Sergio se pone de lado de su hijo:
--¡¡estás despedida¡¡vete¡
Naná llora, suplica:
--¡¡no, no¡¡¡¡digo la verdad¡¡
Víctor la mira desafiante y le dice:
--eso es muy fácil de comprobar... me pediste mi reloj y el dinero que llevaba en la cartera si no es verdad lo que yo digo... no estarán en tu habitación...
Víctor anima a sus padres a ir hacia ahí. Naná está vencida, se hunde aún más ya que el reloj y el dinero quedaron en el piso.
--si, el reloj y el dinero están allá pero es que... --llora Naná
Manuela ya no la quiere escuchar mas y la empleada es despedido. Mira con rencor a Víctor y le dice:
--algún día vas a pagar por todo lo que me has hecho...
--sí, sí... que miedo... --dice él riendo.
Sergio tira a la calle a la sirvienta, padre e hijo se miran con complicidad. Manuela está muy molesta:
--¡¡te lo dije Víctor ... que esto sea la última vez que pasa...¡¡¡¡te prohibo que te vuelvas a meter con nuestras empleadas¡¡
Víctor se iba a defender pero no hace falta. Con orgullo Sergio es el que dice:
--mi hijo es un macho y si tú solo contratas perdidas...
Padre e hijo se van contentos.

1 mes después, totalmente abatida Naná regresa a esa mansión. Los vigilantes no la quieren dejar pasar pero ella ruega suplica. Finalmente logra que Manuela la reciba en la calle.
--¿¿¡que has venido a buscar aquí?¡¡después de tu mentira no tienes nadar que hacer aquí¡¡
--¡¡estoy desesperada... no he encontrado trabajo y no sé a quien acudir ahora¡¡
--¡¡ese es tu problema, seguro que el dinero que te dio me hijo lo malgaste...¡¡perdida¡¡
Manuela la quiere echar a la calle pero muy angustiada Naná dice:
--¡¡estoy embarazada, espero un hijo del señorito Víctor ¡¡
Manuela se ha quedado de piedra.

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